Feng Shui

Ladies&gentlemen, hoy, en la casita de Manderley... el Feng Shui.

El Feng Shui es un sistema chino que se basa en la filosofía tao para, por medio de la estética del hogar, mejorar la vida de sus habitantes.

Es una doctrina que dicta que el flujo vital de energía o chi se ve alterado en función de la disposición del espacio. Tiene mucha consideración sobre las orientaciones de las cosas, porque, según este movimiento, cada punto cardinal goza de una energía diferente.

En resumen, lo que busca el Feng Shui es la armonia, en este caso que contemplo aquí, la armonía para el hogar.

Y puestos a buscar una forma en la que basarnos para decorar estancias, ¿por qué no ésta?

Aquí van unos cuantos consejos si queremos seguir este pensamiento a la hora de colocar muebles y otras cosas de nuestra casa:

Agua y plantas

- La entrada de la casa: es importante que haya una entrada, un recibidor, donde el chi entre cómodamente. No es conveniente que la puerta de entrada dé directamente a una habitación o pasillo.

Puertas demasiado pequeñas impedirán entrar al chi y las grandes lo dejarán entrar con demasiada energía. Una puerta de tamaño medio es lo correcto. Dicha puerta tiene que abrirse hacia dentro y, en función de su orientación, tener elementos decorativos de acorde con ella: agua (N), fuego (S), madera (E) y metal (O).

- La cocina: neutraliza la entrada de energía positiva. Debería estar cerca de la puerta de entrada pero no verse desde la misma. Pintada en tonos ocres o verdes o amarillos (nunca rojos o azules porque ya hay elementos de fuego -fogones- y agua -grifos- suficientes). Nunca situada frente al baño, y si así fuera, con la puerta de éste último cerrada y con una planta separando el espacio entre ambos.
Aunque se coma o cene en la cocina, se deberían distinguir los dos espacios, si no puede ser con un elemento físico, con uno lumínico, es decir, apagando las luces de la zona "cocina" al comer, o bien las de la zona "comedor" al cocinar.
Por cierto, nunca se debe cocinar de espaldas a la puerta. Y los fogones deben estar separados del fregadero. Se pueden separar simbólicamente con madera.

- El baño: representa la capacidad de cuidarse y quererse a uno mismo. Es el espacio orgánico del piso.
Su puerta no debería verse desde el salón-comedor. Debería ser de tamaño medio (ni grande ni pequeño), sencillo. El toilet debería estar separado de la zona de ducha/bañera, aunque solo sea por una cortina, y evitar las ventanas sobre la bañera o en la ducha.
Es importante cuidar su apariencia, su orden, que solo existan cosas pertenecientes a este entorno (nada de medicamentos, ropa para lavar, etc.).

Una planta equilibraría la energía de esta zona.

- La habitación: a mí, personalmente, la zona donde más importante me resultaría a tener en cuenta.

Puertas y ventanas frente a nosotros o en los laterales, para poder vigilarlos. Mientras dormimos entramos en un estado de relax y calma, y bajamos nuestras defensas. La pared del cabecero de la cama debería ser firme y robusta.

El feng shui clásico lo describe así: "montaña protectora en la parte posterior (pared robusta) y Río de la Riqueza al frente (movimiento, puerta).

La cama en el centro provoca inestabilidad, más aún si existe desorden entre la pared y el cabecero.

Mucho mejor estructuras de cama en madera que metálicas.

Se considera que los espejos reducen la capacidad de descanso de las personas, con lo cual no son buenos elementos decorativos en un dormitorio.

- El salón: los muebles deberían formar un espacio cerrado por donde pueda fluir el chi. No se deben colocar muebles frente a la entrada del salón para que pueda entrar.
El sofá no debería estar en el medio de la estancia, sino pegado a una pared desde la que se vea todo el salón.
La mesa debería estar colocada más cerca de una pared, nunca centrada en la estancia.

Las lámparas de pie con iluminación hacia arriba contribuyen a crear una atmósfera relajada.

En general, existen otra serie de consideraciones a tener en cuenta: evitar objetos afilados (mesas cuadradas, columnas...), nunca poner la piscina detrás de la casa, cuidar la posición de los espejos (en la entrada, la energía positiva rebotaría y se iría, por ejemplo), utilizar los colores correctamente, colocar elementos de agua en la parte norte que atraerán la fortuna, utilizar objetos redondeados para contrarrestar esquinas, saber que las plantas contrarrestan los excesos de energía, y un largo etcétera.

Y... después de leer esto, ¿cuántas cosas ahuyentan el chi en vuestras casas? 

En la nuestra, unas cuantas...